Lambretta 150 LI Sidecar Sol 1964
Uno de los vehículos italianos con más trascendencia: la Lambretta 150 S amb sidecar sol del 1964. Un icono del siglo XIX y de la movilidad, porque todo el mundo sabe lo que significa, a lo largo y ancho del planeta. Elegancia, Diseño y practicidad.
Por sus líneas, su sencillez mecánica y sus prestaciones a tan bajos costes de adquisición y mantenimiento, la Lambretta consiguió una popularidad sin igual en la italia de posguerra y, poco a poco, en todo el mundo.
Historia
Esta Lambretta se fabricó en Eibar y el Sidecar se fabricó en Barcelona.
Conducir una Lambretta era sinónimo de libertad, ágil exploración del espacio y facilidad por el trato humano. El scooter se convirtió en el símbolo de un estilo de vida que marcó una época. La Lambretta aparecía de manera impresionante en el cine, en la literatura y en la publicidad entre los símbolos más destacados de una sociedad que cambiaba. Otro fenómeno que acompañaba la Lambretta era el viaje de aventura, donde con el mínimo posible de cosas y una Lambretta se hacía rumbo hacia un destino concreto.
La Lambretta 150Ll es para muchos el modelo más grabado de la marca, recibe numerosos cambios, el motor pasa a 150 c.c., caja de cambios de 4 velocidades, sillín largo estándar y ruedas con neumáticos de 10 “. Con admisión directa y 8 CV a 7.500 rpm, el 150 GS podía alcanzar los 100 km / h.
Una Lambretta restaurada por ClassicCar
Para explicar este apartado, nos centraremos en la Lambretta y el compartimento del copiloto. Hicimos la restauración de la primera por partes, separando la estructura de metal y colocando las piezas del motor que íbamos consiguiendo, al igual que otros elementos como las ruedas o el manillar.
Además, hacíamos pruebas de equilibrio para comprobar que podía aguantar el peso de una persona, ya que algunos materiales tenían bastantes años. Asimismo, usamos spray antioxidante para que algunas piezas recuperarán su aspecto original, aunque después también le daríamos una capa de pintura general.
Tampoco podemos olvidar los asientos, los cuales tuvimos que pedir completos y a medida para que cupieran tanto en la moto como en el compartimento extraíble. Finalmente, colocamos un soporte que hacía de unión entre la moto y el asiento exterior, terminamos de pulir el maletero y ya teníamos listo nuestra Lambretta con sidecar.
En resumen, la restauración de la Lambretta 150 Ll con sidecar Sol del 1964 fue un proceso increíble que nos permitió traer al presente una moto con mucha historia y con un aspecto realmente espectacular.
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En resumen, la restauración de la Lambretta Ll 150 con sidecar Sol del 1964 fue un proceso increíble que nos permitió traer al presente una moto con mucha historia y con un aspecto realmente espectacular.
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